viernes, 7 de junio de 2013

Te lo aseguro



¿Por qué no me tiras al lago

o me atas una soga al cuello?

¿Por qué no diseccionas cada uno de mis órganos

para ver dónde estaba lo que me has quitado?

¿Por qué no aprietas el gatillo

y me vuelas los sesos? 

Quizá así termine rápido de amarte

y no tendrás que seguir arrastrándome,

dejando el rastro de mi sangre por el piso.

¿Por qué no me rematas?

Ya casi es viernes, quizá mañana esté ardiendo;

no esperes a pasar un fin de semana

con un cuerpo que ya empieza a oler.

Si la poesía funciona cuando la musa mata al poeta,

tú lo estás haciendo muy bien.



Te lo aseguro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario